La pensión media en España en noviembre era de 835 euros. El año pasado, el gobierno subió las pensiones el 1%, de cara a 2012 (subida provisional). Según el IPC de noviembre, que fue del 2,9%, en 2012 los pensionistas deberían haber tenido una pensión un 2,9% mayor (pero solo subió un 1%). Ahora, según la ley, los jubilados deberían cobrar en enero una paga en enero compensatoria, que incluyera el 1,9%.
Pero el gobierno de Mariano Rajoy ha decidido incumplir su última promesa electoral y modificar la ley para no compensar esa diferencia. A esta cantidad hay que sumar el coste mensual de no cambiar la base sobre la que se aplicará la subida aprobada en consejo de ministros (un 1% con carácter general y un 2% para las pensiones inferiores a 1.000 euros).
La subida del 2% para las pensiones inferiores a 1.000 euros debería calcularse con la subida del 2,9% de la inflación. Al no actualizar la subida del IPC, al pensionista le quitarán en total 436 euros de su pensión el año que viene. Esta cantidad jamás se recuperará.