Según datos de la Seguridad Social, el 85% de las personas cuidadoras de dependientes -cuya cotización se encargaba de pagar el Ministerio de Sanidad- han sido dadas de baja del sistema, lo que son alrededor de 145.000 personas. Estas personas recibían un ayuda por atender a familiares dependientes, y además, se les pagaba una cotización a la Seguridad Social.
Con la nueva ley de dependencia, se eliminó esta cotización. El recorte se justificó en la necesidad cambiar estas prestaciones económicas por servicios profesionales, que generan empleo. El problema está en que con la grave crisis económica que sufre España, lo normal es que un dependiente no tenga dinero para pagar una residencia. Las cotizaciones por este concepto se vendieron en su día como complemento para las mujeres (sobretodo) que dejaron sus trabajos para cuidar de sus padres o familiares discapacitados.
Añadir nuevo comentario